La Segunda de Brahms

El compositor Magnus Lindberg, internacionalmente reconocido desde hace décadas -compositor residente de la Orquesta Filarmónica de Nueva York de 2009 a 2012-, concluyó recientemente un concierto para viola que podrá escucharse por primera vez en el Estado. Una obra de reminiscencias impresionistas en la que la majestuosidad de la naturaleza nórdica, con la participación activa de los metales, traza un friso afectivamente trepidante con la presencia imprescindible del solista, Lawrence Power en la ocasión. La programación de una obra de Lindberg en L’Auditori no es nueva, y este año en el concierto dirigido por Matthias Pintscher será ensamblada con una de las composiciones más queridas del repertorio sinfónico: la Segunda sinfonía de Brahms. Es una obra que destaca por un lirismo que lo acerca también a la experiencia de la naturaleza, por su respiración amplia y la espontaneidad aterradora de himnos de una belleza incontestable, que se vehiculan con una intensidad que propicia la transformación orgánica de los materiales.