Inmortal o eterno es una de las definiciones que el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española da al termino imperecedero. Entre las obras que la Bilbao Orkestra Sinfonikoa y el Cuarteto Quiroga interpretaron en el Palacio Euskalduna hay una distancia temporal de dos siglos. Las obras de Beethoven fueron compuestas entre 1810 y 1813, mientras que Absolute Jest del compositor norteamericano John Adams lo fue en 2012. El nexo de unión entre las tres obras es el genio de Beethoven.
El concierto comenzó con la interpretación de la obertura de Egmont, Op.84 obra formada por diez piezas de música incidental para la tragedia del mismo nombre de Goethe. Su escucha sirvió como aperitivo musical, definiendo en el espectador la referencia sonora que estaría presente a lo largo de todo el concierto. Las cuerdas no necesitaron más que la media docena de acordes iniciales para situar al público en el paisaje sonoro propio de Beethoven, de ahí en adelante la interpretación continuó sin sobresaltos hasta el brillante punto final que la sección de metales puso a la breve pieza.
El Cuarteto Quiroga subió al escenario a interpretar la obra Absolute Jest. Adams tomó como base para su composición fragmentos de los últimos cuartetos para cuerda de Beethoven. Utilizando su propio lenguaje musical, recurrió a técnicas compositivas propias del neoclasicismo para elaborar su obra. La aventura que puede suponer para el público el escuchar una obra compuesta en el siglo XXI y con marcadas características minimalistas no fue tal. Las reconfortantes melodías de Beethoven emergían a modo de red de seguridad en cuanto la música se alejaba del camino programado. El maestro Erik Nielsen supo en todo momento mantener un balance correcto entre las diferentes secciones de la orquesta, y entre esta y el cuarteto solista. La interpretación fue dinámica y llena de energía. El sonido resultó limpio y claro en todo momento, destacando especialmente la transición entre el Meno Mosso y Vivacissimo. El cuarteto interpretó como bis el tercer movimiento del Cuarteto de cuerda núm. 16, de Beethoven.