Maby estudió una licenciatura en Educación en la Universidad Iberoamericana, así como la licenciatura en Piano y la maestría en Musicología en la Universidad Nacional Autónoma de México. Da clases de piano y disfruta tanto hacer, pensar y experimentar la música como hablar y escribir sobre música. Aunque sus gustos e intereses van del barroco al siglo XX y la música académica mexicana, sus mayores debilidades son Brahms y Bach.
En concierto fuera de temporada, la OFUNAM ofreció un programa de experencias sonoras contrastantes, cuyo atractivo principal fue la presencia del Trío Maisky.
En el marco del quincuagésimo aniversario del movimiento estudiantil del 68, la OFUNAM nos ofreció un programa cuidadosamente elegido, con tres obras que pasaron de la explícita conmemoración de lo sucedido el 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco a una reflexión optimista sobre la permanencia de la vida, y de la música, a pesar de la muerte y las atrocidades humanas.
La Sinfónica Nacional se unió al festejo del 100 aniversario del nacimiento de Leonard Bernstein, ofreciéndonos un programa con una selección de sus obras, con la interesante excepción de La pregunta sin respuesta, de Charles Ives.
Con instrumentos barrocos invitados, la OFUNAM nos ofreció su versión de la Pasión según San Juan explorando posibilidades y combinando elementos de la interpretación históricamente informada con los recursos propios de la Filarmónica. Como resultado, disfrutamos de una versión interesante y coherente bajo la atenta dirección de Massimo Quarta.
Cuando en un programa aparece la leyenda “estreno mundial”, la expectativa de la novedad hace de esa obra el atractivo principal. Precisamente eso pasó este viernes en Bellas Artes: la Sinfónica Nacional nos ofreció el estreno de la versión definitiva del Concierto-son para flauta y orquesta del célebre compositor mexicano Arturo Márquez.
José Pomar (1880-1961), fue un pianista y compositor mexicano cuya discontinua vida musical estuvo fuertemente ligada a su vida política. Repasamos en este interesante artículo sus composiciones para piano.
La Orquesta Sinfónica Nacional nos ofreció el tercer concierto para piano de Beethoven, con Anne-Marie McDermott como solista invitada, y en la segunda mitad el impactante y muy operístico Stabat Mater de Rossini.
Miembros de la OSN, solistas invitados, un gran coro, muchas percusiones, micrófonos, capoeira, bailarín... dieron vida a la La pasión según San Marcos del compositor argentino Osvaldo Golijov.
En enero de este año, después de varias temporadas sin director, la Filarmónica de la UNAM nombró director artístico al violinista Massimo Quarta. En este concierto, el tercero de los cuatro que dirige en su primera temporada como titular, nos ofreció el concierto para violín de Beethoven en el doble papel de solista y director, y la monumental novena sinfonía de Schubert.
Con el Réquiem de Brahms como único número del programa, la Filarmónica de la Ciudad de México nos convocó a esta casi laica meditación sobre la muerte.
Para este programa, la Filarmónica de la Ciudad de México nos recibió con una orquesta de cuerdas muy reducida y un clavecín que dividía el semicírculo en dos partes iguales. Como estaba anunciado, Scott Yoo, director artístico de la Filarmónica, se bajó del podio y se incorporó a la orquesta como violín principal y solista.
Es importante que se programe música mexicana y latinoamericana. Nosotros mismos conocemos poco nuestro repertorio y sólo incluyéndolo regularmente en las temporadas de conciertos podremos darle vida y acercarnos a él, y eso además propicia una sana diversidad musical. En este concierto la OFUNAM contribuyó a ese propósito.
El Instituto Nacional de Bellas Artes cumplió setenta años. Para celebrarlo, la Orquesta Sinfónica Nacional, una de sus principales agrupaciones, preparó un programa que tuvo como número principal la cantata Dona nobis pacem de Vaughan Williams.
La noche del 18 de noviembre, la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, de visita en Bellas Artes, nos ofreció el estreno mundial de la suite sinfónica Xpu Ha: Donde nace el agua.
La Filarmónica de la Ciudad de México nos convocó al concierto Canciones de Wesendonck. Como el título lo revela, esta obra de Wagner fue el número central, y estuvo muy bien enmarcada por el Capricho español de Rimsky-Korsakov y Muerte y transfiguración de Richard Strauss: interesante programa con un cuidado guion dramático que fue de lo festivo a lo contemplativo.
En este primer programa, la OFUANM nos ofreció las dos primeras sinfonías de Beethoven, bajo la batuta del reconocido director Jorge Mester, separadas por el primer concierto para clarinete de Weber, con Manuel Hernández, clarinete principal de la filarmónica, como solista.
La OSN nos ofreció un programa con cierto aire oriental. Como primer número tuvimos The WAVE impressions, concierto para marimba y orquesta de Keiko Abe, compositora y marimbista japonesa, y en la segunda parte la muy conocida suite orquestal Scheherazade de Rimski-Korsakov.