Intérprete: Vida Miknevičiūtė

El concierto con el que La Filarmónica inauguró su temporada finalizó con un asombroso despliegue del Orfeón en la Novena de Beethoven (perfectamente afinado y nítidamente proyectado sobre la masa instrumental de la Orquesta de Praga) que no proporcionó, sin embargo, la satisfacción que requerían las circunstancias.

Eine vielschichtige Partitur, ein Korngold-Fan als Dirigent, eine schlüssige Inszenierung, ein hervorragendes Protagonistenpaar: Bei der Premiere der Toten Stadt bleiben keine Wünsche offen.

Wotan's predicaments provide Sydney's victory: Chief Conductor Simone Young has her musicians on some of their best form in recent years, with only a few question marks over an excellent concert performance.