En vivo, Video: Buscador de críticas de conciertos de música clásica, ópera, ballet y danza | Borja Quiza

Una de las zarzuelas más atractivas del repertorio recibe en el Teatro de la Zarzuela un montaje y dirección magníficos, en el cual los artistas se desenvuelven de manera brillante.

La Temporada Lírica de La Coruña presentó la ópera de Gounod en una acertada producción escenificada firmada por Daniele Piscopo y con un brillante acompañamiento orquestal a cargo de la Sinfónica de Galicia.

La ópera de John Adams sobre el histórico encuentro entre Richard Nixon y Mao Tse-Tung está interpretada de manera excelente en todos los aspectos y con un auténtico hallazgo en el podium bajo el nombre de Olivia Lee-Gunderman.

La obra de Goya ilumina la escena y complementa a unos brillantes intérpretes que recrean la interesante música del maestro Barbieri en una zarzuela de libreto algo denso.

Una poderosa versión de concierto de La forza del destino llena de emoción el Teatro Colón bajo la eficaz dirección de Giuseppe Finzi.

Se estrena en el Teatro Real El abrecartas, la última ópera de Luis de Pablo con un reparto completamente nacional interpretando a los grandes poetas del siglo XX.

El Teatro Real inicia la temporada 21-22 con una agitada producción de La Cenerentola de Rossini con dirección musical de Riccardo Frizza y esscénica de Stefan Herheim.

La espléndida producción de El barberillo de Lavapiés del Teatro de la Zarzuela llega al escenario de Les Arts para convertirlo en una fiesta con chispeante música, buenas voces y una orquesta magníficamente modulada.

El Teatro Real renueva la producción de Damiano Michieletto de L'elisir d'amore y apuesta por el dinamismo con cantantes versátiles como actores.

Noche de segundo reparto en el que la soprano Olga Kulchynska fue el eje de atención y reclamo en una producción de reality televisivo se implantó en el escenario desterrando la imagen genuina de la Ceilán de Bizet.

El barberillo de Lavapiés es una zarzuela de sempiterna actualidad y esta producción promete estar a la altura de la calidad de su música y de su libreto.

Esta Carmen es una explosión de fuerza y destino, que sabe conjugar la violencia irrefrenable de unas pulsiones desatadas con la desolación de una tragedia inevitable.

La Fundación Juan March apostaba, como hizo el año pasado con Cendrillon de Pauline Viardot, por la ópera de cámara, en este caso, Fantochines del compositor madrileño Conrado del Campo.